Monday, August 8, 2011

MEDICINA HIPERBÁRICA: OXÍGENO PURO PARA MEJORAR LA SALUD

MEDICINA HIPERBÁRICA: OXÍGENO PURO PARA MEJORAR LA SALUD


Oxígeno 100% puro es la clave de esta variante de la Medicina, la cual tiene aplicaciones en diversos padecimientos, rehabilitación de lesiones, para tonificar la piel e, incluso, mejorar el sistema inmunológico y, de esta manera, prevenir enfermedades y prolongar la vida.

Aun sin tanta difusión en México como en otros países, la Medicina hiperbárica empezó a llamar la atención del mundo cuando se dijo que Michael Jackson recurría a ella para retardar el envejecimiento, ¿lo recuerda? Más adelante se supo que Fidel Castro y hasta el papa Juan Pablo II suelen darse su baño de oxígeno en una cámara especial que cumple con tal fin, y que algunos deportistas de alto nivel hacen lo propio para recuperarse de lesiones de consideración.

Lo cierto es que se tienen datos desde 1662 de tratamiento hiperbárico (hiper = aumento, bárico = presión), los cuales refieren las primeras pruebas realizadas por un médico británico de apellido Henshaw a fin de mejorar heridas graves. Los llamados "baños de aire comprimido" se popularizaron en el siglo XIX por toda Europa y llevaron pacientes de Estados Unidos. En América, la primera cámara hiperbárica fue construida en Canadá, en 1860, para tratamientos de desórdenes nerviosos.

Ya en el siglo XX la NASA (agencia estadounidense de investigación en aeronáutica y el espacio) se adentró en el estudio del oxígeno en los campos de la aviación y el buceo marino, lo cual trascendió a la comunidad científica -incluyendo a la Medicina-, lo cual dio pie a la fundación de la Undersea and Hyperbaric Medical Society (Sociedad Médica Submarina e Hiperbárica), en 1967, incrementándose con ello sus aplicaciones terapéuticas.

La denominada oxigenación hiperbárica es un método que consiste en hacer respirar al paciente oxígeno al 100%, a una presión entre 1.5 a 3 atmósferas absolutas (ATA), lo que equivale a la presión que se soporta en el agua a una profundidad de entre 5 y 20 metros. Para explicarlo en otras palabras, de forma natural la presión atmosférica a nivel del mar es de 14.7 libras por pulgada cuadrada (760 mm hg) -lo que equivale a una atmósfera absoluta (ATA)-, de manera que al elevarse a 2 o 3 veces más ayuda a que grandes cantidades de oxigeno se disuelvan en la sangre y en líquidos de otros tejidos (10 a 15 veces más), lo que hace que el vital gas llegue a todas las partes del cuerpo, especialmente a aquellas áreas afectadas por alguna lesión o enfermedad.
  
El oxígeno es suministrado a través de máscaras instaladas en el interior de una cápsula que recibe el nombre cámara hiperbárica, la cual es un recipiente hermético construido con planchas de acero soldadas, frecuentemente en forma cilíndrica, provisto de una serie de sistemas y accesorios que permiten el aumento controlado de la presión; para algunos t iene la apariencia de una nave espacial.